Entre la brecha,
lo suficientemente abierta, lo suficientemente cerrada,
que existe entre tu y yo,
he aprendido por el camino,
que no soy quien para decidir,
no me queda más que ir tropezando poco a poco,
y esperar,
la luz dará una razón al día,
te encontraré,
los recuerdos y días sobre los que marque el camino,
me acercarán, me llevarán a ti,
seguiré siendo yo,
y dejaré esta brecha para el olvido,
seguiré siendo uno,
aunque para mi, sea dos.
Y buscaré el más triste de los recuerdos,
para que sea otra la razón,
de que se me amarguen los días,
y no poder culparte,
por hacer de mi no más que un ingrávido “x”,
o un posible “y”,
porque el álgebra no es tu punto fuerte,
y volveré a dibujar con tinta de limón,
ese camino que me lleva a ti,
o a lo impredecible,
o a misma orilla del abismo,
y te encontraré,
porque no me gusta recordar lo que no somos y fuimos,
por eso hoy,
me consagro a lo prohibido.
para que sea otra la razón,
de que se me amarguen los días,
y no poder culparte,
por hacer de mi no más que un ingrávido “x”,
o un posible “y”,
porque el álgebra no es tu punto fuerte,
y volveré a dibujar con tinta de limón,
ese camino que me lleva a ti,
o a lo impredecible,
o a misma orilla del abismo,
y te encontraré,
porque no me gusta recordar lo que no somos y fuimos,
por eso hoy,
me consagro a lo prohibido.
Dejo aquí un poema, que pudimos escibir a medias
más impovisado que un llanto animal;
Dani García y La señorita ojos de gato.
"Has aparecido en mi mañana,
y no te has disuelto en el café.
Es curioso que me preguntes,
si sería casualidad que nos volvieramos a ver".
Gran entrada!! ésta me ha gustado realmente :D
ResponderEliminar"pregúntale,
ResponderEliminara la mañana,
por los pelos de loca,
el aroma a café,
quizá solo ella sepa,
de sabanas revueltas,
carmín desteñido,
tostadas francesas,
poemas a medias,
miradas e historias mirando al techo, olvidando si fue la casualidad,
la que hizo que nos volviéramos a ver".
gracias